Los gusanos pulmonares podrían ser la mayor amenaza para la salud de tu perro sin que lo sepas.
A diferencia de los parásitos intestinales (como los gusanos planos y los gusanos redondos), los gusanos pulmonares adultos viven en el corazón y en los vasos sanguíneos de los pulmones del perro, por lo cual pueden ser mortíferos si no se administra ningún tratamiento.
Aunque antes eran poco comunes, los gusanos pulmonares se han propagado a nuevas zonas y ahora representan un riesgo para los perros de cualquier raza y edad.
Descubre cuáles los signos de las infecciones por gusanos pulmonares en perros para que puedas reconocerlos en tu perro y llevarlo de inmediato con el médico veterinario.
¿Cómo pueden infectarse de gusanos pulmonares los perros?
El gusano pulmonar canino, cuyo nombre científico es Angiostrongylus vasorum, infecta a los perros (y a los zorros) cuando comen, ya sea a propósito o por accidente, babosas o caracoles infectados con las larvas del parásito. Es fácil que esto suceda cuando los perros husmean entre la hierba, comen pasto, beben agua estancada o de exteriores y juegan con juguetes que se quedan a la intemperie.
Signos de las infecciones por gusanos pulmonares: ¿cómo saber si mi perro se infectó de estos parásitos?
A diferencia de algunos otros parásitos que pueden causar malestar o enfermedades en los perros, los gusanos pulmonares pueden ser mortíferos si la infección no se diagnostica y trata. Sin embargo, los gusanos pulmonares afectan a los perros de forma distinta. A menudo los perros no presentan signos en las etapas iniciales de la enfermedad, aunque algunos perros pueden manifestar signos leves o graves. La probabilidad de que el perro se recupere aumenta si la infección se detecta y trata cuanto antes, y por eso es fundamental saber reconocer sus signos.
- Dificultad para respirar
La tos persistente es uno de los signos más comunes de la infección de gusanos pulmonares en perros. Estos parásitos incluso pueden provocar que el perro tosa sangre. La tos con sangre nunca debe ignorarse ni confundirse con otras infecciones respiratorias más comunes, como la tos de las perreras.
- Falta de energía
Los perros infectados con gusanos pulmonares por lo general se cansan con facilidad, incluso con poco ejercicio. La fatiga podría ser uno de los primeros cambios físicos que observes si tu perro se infecta, en particular si es un cachorro que normalmente es muy activo.
- Problemas de coagulación sanguínea
Si tu perro sangra de manera persistente debido a una herida menor, ese podría ser un signo de infección por gusanos pulmonares. Estos parásitos pueden causar problemas de coagulación sanguínea, y es por eso que los perros infectados son más propensos a tener hemorragias nasales y anemia. La anemia hace que los ojos y las encías del perro se vean más pálidos que de costumbre. Los gusanos pulmonares también pueden causar hemorragias en la parte blanca de los ojos.
Si se infecta, tu perro puede presentar otros problemas de sangrado:
- heces con sangre
- orina con sangre
- vómito con sangre
- Cambios de comportamiento
Los cambios de comportamiento pueden ser difíciles de identificar, pero si notas que tu perro está aletargado o deprimido, o si sufre convulsiones, debes llevarlo de inmediato con el médico veterinario.
- Malestar general
Las infecciones por gusanos pulmonares también pueden ir acompañadas de vómito y diarrea, pero no siempre es así, pues estos también son signos de muchos otros problemas de salud, comunes o pasajeros, como las alergias a ciertos alimentos o los trastornos estomacales.
Si tu perro se llegara a infectar con gusanos pulmonares, podría manifestar otros signos inespecíficos, como pérdida de peso o falta de apetito. Los gusanos pulmonares pueden estar presentes en el cuerpo del perro durante meses sin causar ningún signo evidente, y los signos de infección se confunden fácilmente con los de otras enfermedades, por lo que el diagnóstico puede ser complicado.
Cómo diagnosticar una infección causada por gusanos pulmonares
Si detectas cualquiera de los signos de infección por gusanos pulmonares, es de vital importancia que lleves a tu perro con el médico veterinario cuanto antes.
El médico veterinario podrá revisar a tu perro y realizar los análisis adecuados para detectar o descartar la enfermedad, por ejemplo tras examinar sus heces al microscopio en busca de huevos y larvas del parásito. También es posible que tome muestras de sangre y radiografías de tórax y que lleve a cabo una broncoscopía (un procedimiento en el que se utiliza una cámara para explorar las vías respiratorias del perro) en caso de que no encuentre signos del parásito en las heces.
Una vez confirmado el diagnóstico, el médico veterinario puede administrar un tratamiento contra la infección del gusano pulmonar canino, que en muchos casos logra que el perro se recupere por completo.
¿Cómo puedo evitar que mi perro se infecte con gusanos pulmonares?
- Revisa si vives en una zona de alto riesgo. Los gusanos pulmonares se han propagado mucho en años recientes y ahora es bastante común encontrarlos en gran parte del país, y por eso es muy importante prevenir ante todo que tu perro se infecte. Es imprescindible tomar medidas urgentes para proteger a tu perro si vives en una zona en la que se han reportado infecciones por gusanos pulmonares o si tu perro suele comer babosas o caracoles.
- Utiliza un tratamiento preventivo mensual contra los gusanos pulmonares. Consulta al médico veterinario antes de elegir un tratamiento preventivo. No todos los desparasitantes son eficaces contra los gusanos pulmonares y no todos se administran con la misma frecuencia. Para que la protección sea completa es necesario aplicar el tratamiento contra los gusanos pulmonares una vez al mes, a diferencia de otros tratamientos desparasitantes que suelen administrarse cada tres meses. Los perros son curiosos por naturaleza y es muy probable que no sepamos lo que han estado olfateando mientras pasean por el jardín. Utilizar un tratamiento preventivo contra los gusanos pulmonares te dará la tranquilidad de saber que tu perro está protegido contra cualquier amenaza oculta.
- Ten el hábito de recoger las heces de tu perro. Siempre recoge y desecha de manera segura las heces de tu perro. Los gusanos pulmonares pueden esparcirse e infectar a otros perros mediante las heces. Deshacerte adecuadamente de las heces ayudará a interrumpir el ciclo de vida del parásito y a reducir su propagación.