Dentro de la búsqueda por el bienestar animal existen muchos frentes por lo que debemos seguir luchando, entre ellos que los animales dejen de sufrir por las etiquetas que nosotros mismos les imponemos.
Los perros son perros, independientemente de su raza, color o tamaño. Por eso, en Mi Mascota y Yo colaboramos con Hugo Pesquera, animalista y fundador de ProCan, siempre en busca de ayudar y participar en el camino que nos acerque al bienestar animal.
Los perros que han sido calificados como Perros Potencialmente Peligrosos (PPP) sufren a diario la discriminación por parte de la sociedad. Son tratados como perros asesinos, que a su vez ocasiona olas de abandonos, malos tratos, vejaciones por las que finalmente, si tienen suerte, acaban en una protectora.
Pero esto no termina aquí, estos perros llegan a las protectoras y sus opciones de conseguir una familia, son reducidas a la mínima expresión ya que son rechazados por el miedo que sienten las personas hacia ellos.
Esta misma historia la vivió la protagonista de hoy, una perra muy bien llamada Risas, encantadora, juguetona, muy divertida, que cuando se la conoce, enamora.
La historia de Risas
Risas es una perra preciosa llena de vida, que hasta los 2 años vivió en un pueblo de Cádiz, junto con su dueña, dos perros y tres gatos.
Estaba acompañada por su dueña, con perros y gatos, que más podría pedir… hasta que su dueña, tras vivir episodios de violencia de género, se vio abocada a vivir en la indigencia.
Pese a su situación, luchó por seguir con sus animales, pese a que tanto su situación como la de sus animales carecía de las condiciones mínimas que cualquier animal debería tener.
La dueña adoraba a sus animales, el problema fue que el momento tan critico que vivía, tanto psicológico como económico, provocó que tuviese que buscar una solución, sus animales no se merecían seguir en esas condiciones.
Contactó con una asociación de la zona para dar con una solución y encontrarles un hogar donde estuviesen como se merecían.
Cuando la protectora recibió el aviso, no podían hacerse cargo de ellos, ya que se encontraban sobrepasados por la cantidad de perros y gatos abandonados. Pero no dejaron de buscar otras opciones para Risas y sus compañeros.
En muchas ocasiones, desde ciudades mas pequeñas, se mandan perros a ciudades mas grandes, donde hay más posibilidades de adopción y de difusión, como pasó en el caso de Risas.
Finalmente llegó a una protectora de Madrid que, pese a la problemática de estar catalogada como perro potencialmente peligroso, y sabiendo que sus opciones de adopción eran más limitadas, no dejaron de luchar por ella ni un minuto.
Risas y su encuentro con Hugo
La vida da muchas vueltas y si no que se lo digan a Risas. Después de en unas condiciones precarias con un futuro más que oscuro, apareció junto con Hugo en la sección de Sálvame.
Y no solo fue adoptada, sino que Risas hizo una función importantísima y necesaria. Ayudó a dar voz a todos los perros que como ella, han sido mal catalogados como Perros Potencialmente Peligrosos
Tras su paso por la televisión, muchos otros perros de la protectora fueron adoptados. Un final feliz lo mires por donde lo mires.
