Todos los casos relacionados con el bienestar animal son importantes y debemos prestar atención a todos, por ello, en Mi Mascota Y Yo, con el compromiso de hacer visibles a los gatos y fomentar el no abandono de los mismos, colaboramos con Hugo Pesquera, fundador de la Escuela ProCan y colaborador con infinidad de protectoras en lucha por el bienestar animal, para dar a conocer estos casos.
Para empezar, queremos que conozcáis la situación de las colonias felinas, aquellos grupos de gatos que viven en libertad en zonas urbanas.
Estos gatos, gracias a las protectoras y algunos Ayuntamientos (poco a poco se van involucrando más) pueden vivir en colonias controladas sanitariamente a través del método C.E.R. (Capturar, Esterilizar y Retornar). Este procedimiento lo llevan a cabo las protectoras con el objetivo de garantizar la salud de esos gatos. El método C.E.R. consiste en llevar los gatos a los centros veterinarios para que puedan ponerles las vacunas y desparasitaciones necesarias y hacer algo muy importante, esterilizarlos. Así, se evita que las colonias vayan a más y una vez hecho todo este trabajo, puedan volver a su lugar de origen: la calle donde viven.
Seguramente ahora te estés preguntando: ¿por qué se les devuelve y no se les busca un hogar? Para asegurar su comodidad, ya que como son animales hechos a vivir en la calle y tienen poca sociabilización, lo normal es que no lleguen a adaptarse a vivir en una familia.
Un caso muy diferente es el de Jonás, un gato en libertad de unos 10 meses que fue brutalmente maltratado. Hasta hace un par de meses Jonás vivía junto con otros tantos gatos en una colonia controlada por la protectora Abrazo Animal, en un pueblo de la comunidad de Madrid.
Jonás fue brutalmente maltratado y sufrió un cruel disparo con una escopeta que le hizo perder la pata delantera. Por suerte, al ser muy pequeño se podía adaptar correctamente a las personas y a una casa.
Gracias a nuestro compañero Hugo Pesquera, que fomenta la adopción de animales en su sección semanal sobre el abandono animal en Sálvame, Jonás se convirtió en el primer gato al que se le buscaba un hogar. Al hacer visible su caso en televisión, aparte de encontrar una familia que le acogiera, también sirvió para dar visibilidad a sus compañeros felinos que están desprotegidos y hacer llegar el mensaje fundamental en contra del maltrato animal a millones de personas.
Juntos tenemos la responsabilidad de proteger y esterilizar a nuestros gatos para evitar que si salen a la calle se reproduzcan y existan más gatos abandonados. Todo lo que hagamos por y para el bienestar animal de nuestros pequeños felinos, es poco. Son los grandes desconocidos. Por eso mismo, no os quedéis parados, porque entre todos, su bienestar estará mucho más cerca.
